lunes, 27 de abril de 2015

Memorias de Nueva York (IV parte) ¡Chelsea Market!

Como es habitual en mis viajes, en el último día trato de ver y hacer de todo, aunque eso implica terminar fatigada hasta casi perder la conciencia, y en Nueva York esto no fue la excepción. Aunque la verdad, les confieso algo ¡no me arrepiento! adoro el caos y andar de aquí para allá.

Pero continuando con mi historia, resulta que en el último día por la gran manzana, caminé muchisimo, yo creo que fácil me eche como un cuarto de Manhattan de este a oeste a pie (y no exagero eh) porque recorrí varias cuadras, aquí va otra confesión, soy del tipo de personas que les gusta perderse en las ciudades y recorrer las calles, para así entender cómo se estructura la ciudad.

Y con ese imputú de curiosidad, muy temprano decidí ir sola a recorrer la isla con un pequeño mapa en la mano; fue así como preguntando de vez en cuando, llegue caminando desde la calle 42 hasta el Barrio Chino (pasando por Madison Avenue) y de allí al puente de Brooklyn, dónde tomé algunas fotos, para este momento ya estaba algo cansada, no obstante decidí continuar mi recorrido, pero esta vez me transladé en el subway hasta el barrio de Chelsea, dónde seguí mi peregrinar por las calles de este famoso barrio, pues había acordado reunirme con mi familia para comer ahí.

Concretamente quedamos en el Chelsea Market, lugar al que nunca había ido y del que tampoco había escuchado hablar (fue mi hermana quien lo sugirió). Al entrar al mercado mi sorpresa fue grande, pues es un espacio encantador, donde converge el estilo vintage-industrial alrededor de los más de 30 comercios, dedicados especialmente a la comida gourmet, aunque también existen tiendas de ropa, barberias, de vinos, entre otros. Pero sin duda mi favorita, fue una tienda de decoración marroquí. 

El recinto está en la 9na. Avenida con la calle 15, y se trata de un mercado ubicado al interior de lo que antes era una fábrica, en donde se inventaron e hicieron por mucho tiempo unas famosas galletas de chocolate. Pero el edificio de ladrillos rojos, no sólo alberga el mercado, ya que en los pisos superiores se encuentran oficinas de empresas importantes como la del buscador más ocupado del mundo o una famosa disquera. 

Por último, no me queda más que desearles que disfruten las fotos, y si tienen oportunidad de ir, les recomiendo enormemente darse una vuelta por el Chelsea Market, pues les aseguro que les encantará desde la fachada hasta el último rincón. 

























































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